El pan de Sant Julià nace de una iniciativa del Parc Agrari de Sabadell, junto con la Cooperativa Agrària de Sabadell i Comarca (Coagsa), la fábrica de harina Moretó de Mollet del Vallès y el Gremi de Flequers de Barcelona. Este pan recibe su nombre por la ermita de Sant Julià d’Altura, situada en el Parc Agrari de Sabadell, y ha sido el primero en obtener la certificación de la Producció Integrada de Catalunya.
El pan de Sant Julià se caracteriza por dos elementos: la precisión en la elección de la materia prima y la garantía de calidad del proceso de elaboración.
Es elaborado diariamente por distintos panaderos de Sabadell en tres formatos: barra rústica, redondo y barra de un cuarto.